El cacao tiene la capacidad de controlar reacciones claves implicadas en los daños oxidativos al ADN, con lo que tiene unas inmejorables propiedades anticancerosas limitando el crecimiento de las células tumorales y frenando la angiogénesis.
Las semillas del cacao son la base para preparar el chocolate y la manteca de cacao.
Por sus propieades antecáncer todos a comer chocolate negro, pero con ciertas consideraciones:
El chocolate debe ser negro y contener al menos un 85% de cacao para que tenga un índice glucémico bajo y no nos aporte demasiadas calorías.
Podemos consumir unos 20gr al día, lo que supone unas 4 onzas pequeñas. Un placer diario que nos protege del cáncer.
A mí de los que he probado el que más me gusta es éste, de la marca Plamil.
Es ecológico y apto para veganos.
Lo venden en el Corte Inglés.
Una alternativa al cacao es la Algarroba. Se consume principalmente en forma de harina. Contiene menos grasa y azúcar que el chocolate. Y está libre de cafeína y teobromina, los cuales son estimulantes y se encuentran en el chocolate.
Además de chocolate y algarroba podemos hacer distintos postres con cacao en polvo o manteca de cacao.
En el blog podeis ver la receta de una mousse de chocolate crudivegana.