¡Rico y sano no son dos conceptos que deban ir reñidos!
Esperamos que os guste, es todo salud y energía.
12 c. soperas de semillas chía, recién molidas
12 c. soperas de semillas de chía, sin moler
6 c. soperas de cacao en polvo crudo
6 c. soperas de algarroba en polvo cruda
1 c. pequeña de semillas de vainilla
8 orejones, picados muy pequeñitos
8 orejones, remojados y triturados hasta formar una crema
1/2 taza de frambuesas deshidratadas
1/2 taza de coco rallado
1 c. pequeña de hojas de estevia, recién molidas
1 litro de leche de almendras casero
1 pellizquito de sal marina, sin refinar
Para la base
1/2 taza de trigo sarraceno, germinado y deshidratado
Para la mermelada
1 taza de bayas goji, remojadas durante 30 min. en 1/2 taza de agua de manantial o filtrada
Para decorar
1/2 taza de rodajas de fresones, deshidratadas
1 c. sopera de coco rallado
Método de preparación
Mezclar todos los ingredientes secos para la mousse de chía, cacao y frambuesas en un bol y mezclar bien con un batidor de barillas hasta que no haya grumos. Añadir la leche de almendras poco a poco y mezclar bien homogéneamente hasta combinar bien los ingredientes secos con la leche. Reservar como mínimo durante 30 minutos para que la chía absorba bien la leche y se infle.
Mientras tanto, puedes preparar la mermelada de bayas goji. Coloca las bayas goji y el agua de remojo en una batidora y tritura hasta obtener una crema suave. Reservar en la nevera en un bote de cristal tapado.
Cuando hayan pasado los 30 minutos de reposo de la chía, colocar un aro para pasteles de unos 25 cm de diámetro sobre un plato y esparcir de manera homogénea los brotes del trigo sarraceno. Seguidamente, verter la mousse de chía, cacao y frambuesas poco a poco sobre el trigo sarraceno y repartir homogéneamente y nivelando con una espátula.
Dejar reposar durante la noche o durante ocho horas y desmoldar con cuidado.
Decorar con la mermelada de goji, que estará más espesa después de haber reposado, y los fresones deshidratados. Con el coco rallado, decorar el centro del pastel dibujando un corazón blanco.
Ya está listo el pastel para cortar, servir y disfrutar.
Bon appétit!
Esperamos que os guste, es todo salud y energía.
Ingredientes
Para la mousse de chía y cacao
Para la mousse de chía y cacao
12 c. soperas de semillas chía, recién molidas
12 c. soperas de semillas de chía, sin moler
6 c. soperas de cacao en polvo crudo
6 c. soperas de algarroba en polvo cruda
1 c. pequeña de semillas de vainilla
8 orejones, picados muy pequeñitos
8 orejones, remojados y triturados hasta formar una crema
1/2 taza de frambuesas deshidratadas
1/2 taza de coco rallado
1 c. pequeña de hojas de estevia, recién molidas
1 litro de leche de almendras casero
1 pellizquito de sal marina, sin refinar
Para la base
1/2 taza de trigo sarraceno, germinado y deshidratado
Para la mermelada
1 taza de bayas goji, remojadas durante 30 min. en 1/2 taza de agua de manantial o filtrada
Para decorar
1/2 taza de rodajas de fresones, deshidratadas
1 c. sopera de coco rallado
Método de preparación
Mezclar todos los ingredientes secos para la mousse de chía, cacao y frambuesas en un bol y mezclar bien con un batidor de barillas hasta que no haya grumos. Añadir la leche de almendras poco a poco y mezclar bien homogéneamente hasta combinar bien los ingredientes secos con la leche. Reservar como mínimo durante 30 minutos para que la chía absorba bien la leche y se infle.
Mientras tanto, puedes preparar la mermelada de bayas goji. Coloca las bayas goji y el agua de remojo en una batidora y tritura hasta obtener una crema suave. Reservar en la nevera en un bote de cristal tapado.
Cuando hayan pasado los 30 minutos de reposo de la chía, colocar un aro para pasteles de unos 25 cm de diámetro sobre un plato y esparcir de manera homogénea los brotes del trigo sarraceno. Seguidamente, verter la mousse de chía, cacao y frambuesas poco a poco sobre el trigo sarraceno y repartir homogéneamente y nivelando con una espátula.
Dejar reposar durante la noche o durante ocho horas y desmoldar con cuidado.
Decorar con la mermelada de goji, que estará más espesa después de haber reposado, y los fresones deshidratados. Con el coco rallado, decorar el centro del pastel dibujando un corazón blanco.
Ya está listo el pastel para cortar, servir y disfrutar.
Bon appétit!