Creo que la mejor receta anticáncer es "Carpe Diem". Aprovechar cada instante de esta vida, exprimirle el jugo, no aplazar las cosas que nos apetece hacer, ser felices, sonreír...
En esta vida sólo una cosa es segura... algún día moriremos. Las demás cosas son probables, pero segura segura solo es la muerte. Cuando te dicen que tienes cáncer el momento de la muerte lo ves más cercano, pero, ¿quién está libre de un accidente de coche, de un atropello, de un infarto...? Nuestra vida se puede truncar en cualquier momento, y ya no hay vuelta atrás. Ya no podemos decirle "te quiero" a nuestra madre, ya no podemos abrazar a nuestros hijos, hacer el viaje que siempre hemos deseado...
Por eso hay que aprovechar el momento. No dejar de dar un beso o un abrazo a un ser querido, no aplazar el jugar con tu hijo para otro momento, no disfrutar de un baño relajante si es lo que te apetece porque tienes que limpiar, planchar, etc.
Mi receta sería: trabajar menos y disfrutar más. Disfrutar de los hijos, de tu pareja, de tus amigos, pero sobre todo disfrutar de ti. Disfrutar de la soledad, encontrarnos con nosotros mismos y ser felices con nosotros. Si no nos amamos a nosotros mismos, ¿a quién vamos a amar?
Yo siempre he tenido la premisa de disfrutar del momento y hacer aquello que me apetece, aplazando las cosas más desagradables para mí como son limpiar, fregar, etc. Y ahora lo hago más que nunca.
Hoy tras salir de clase de Chi kung me he ido con Iván y el peque a Sierra Nevada, a disfrutar de la nieve y del estupendo día de sol que hace hoy en el sur. Hemos alquilado un trineo y nos hemos deslizado por la ladera de una nevada montaña, hemos gritado liberando adrenalina hasta la saciedad. Ha sido un día muy hermoso. Os dejo con una foto de Sierra Nevada para que veais que bonita está la nieve y la luz tan estupenda.
