¿Cuál es la causa del cáncer?
El cáncer comienza en una célula. La transformación de una célula normal en tumoral es un proceso multifásico y suele consistir en la progresión de una lesión precancerosa a un tumor maligno. Estas alteraciones son el resultado de la interacción entre los factores genéticos del paciente y tres categorías de agentes externos, a saber:
carcinógenos físicos, como las radiaciones ultravioleta e ionizantes;
carcinógenos químicos, como los asbestos, los componentes del humo de tabaco, las aflatoxinas (contaminantes de los alimentos) o el arsénico (contaminante del agua de bebida);
carcinógenos biológicos, como las infecciones causadas por determinados virus, bacterias o parásitos.
El envejecimiento es otro factor fundamental en la aparición del cáncer. La incidencia de esta enfermedad aumenta muchísimo con la edad, muy probablemente porque se van acumulando factores de riesgo de determinados tipos de cáncer. La acumulación general de factores de riesgo se combina con la tendencia que tienen los mecanismos de reparación celular a perder eficacia con la edad.
Factores de riesgo del cáncer
El consumo de tabaco y alcohol, la dieta malsana y la inactividad física son los principales factores de riesgo de cáncer en todo el mundo. Las infecciones crónicas por VHB, VHC y algunos tipos de PVH son factores de riesgo destacados en los países de ingresos bajos y medianos. El cáncer cervicouterino, causado por PVH, es una de las principales causas de defunción por cáncer en las mujeres de países de ingresos bajos.
¿Cómo se puede reducir la carga de morbilidad por cáncer?
Se sabe mucho acerca de las causas del cáncer y las intervenciones para prevenirlo y tratarlo. Es posible reducir y controlar el cáncer aplicando estrategias de base científica destinadas a la prevención de la enfermedad así como a la detección temprana y al tratamiento de estos enfermos. Muchos cánceres tienen grandes probabilidades de curarse si se detectan tempranamente y se tratan de forma adecuada.
Modificación y prevención de los riesgos
Más del 30% de las defunciones por cáncer podrían evitarse modificando o evitando los principales factores de riesgo, tales como:
el consumo de tabaco;
el exceso de peso o la obesidad;
las dietas malsanas con un consumo insuficiente de frutas y hortalizas;
la inactividad física;
el consumo de bebidas alcohólicas;
las infecciones por PVH y VHB;
la contaminación del aire de las ciudades;
el humo generado en la vivienda por la quema de combustibles sólidos.
El consumo de tabaco es el factor de riesgo más importante, y es la causa del 22% de las muertes mundiales por cáncer en general, y del 71% de las muertes mundiales por cáncer de pulmón. En muchos países de ingresos bajos, hasta un 20% de las muertes por cáncer son debidas a infecciones por VHB o PVH.
Estrategias de prevención
intensificar la evitación de los factores de riesgo recién enumerados;
vacunar contra los PVH y el VHB;
controlar los riesgos ocupacionales;
reducir la exposición a la radiación solar.
El cáncer comienza en una célula. La transformación de una célula normal en tumoral es un proceso multifásico y suele consistir en la progresión de una lesión precancerosa a un tumor maligno. Estas alteraciones son el resultado de la interacción entre los factores genéticos del paciente y tres categorías de agentes externos, a saber:
carcinógenos físicos, como las radiaciones ultravioleta e ionizantes;
carcinógenos químicos, como los asbestos, los componentes del humo de tabaco, las aflatoxinas (contaminantes de los alimentos) o el arsénico (contaminante del agua de bebida);
carcinógenos biológicos, como las infecciones causadas por determinados virus, bacterias o parásitos.
El envejecimiento es otro factor fundamental en la aparición del cáncer. La incidencia de esta enfermedad aumenta muchísimo con la edad, muy probablemente porque se van acumulando factores de riesgo de determinados tipos de cáncer. La acumulación general de factores de riesgo se combina con la tendencia que tienen los mecanismos de reparación celular a perder eficacia con la edad.
Factores de riesgo del cáncer
El consumo de tabaco y alcohol, la dieta malsana y la inactividad física son los principales factores de riesgo de cáncer en todo el mundo. Las infecciones crónicas por VHB, VHC y algunos tipos de PVH son factores de riesgo destacados en los países de ingresos bajos y medianos. El cáncer cervicouterino, causado por PVH, es una de las principales causas de defunción por cáncer en las mujeres de países de ingresos bajos.
¿Cómo se puede reducir la carga de morbilidad por cáncer?
Se sabe mucho acerca de las causas del cáncer y las intervenciones para prevenirlo y tratarlo. Es posible reducir y controlar el cáncer aplicando estrategias de base científica destinadas a la prevención de la enfermedad así como a la detección temprana y al tratamiento de estos enfermos. Muchos cánceres tienen grandes probabilidades de curarse si se detectan tempranamente y se tratan de forma adecuada.
Modificación y prevención de los riesgos
Más del 30% de las defunciones por cáncer podrían evitarse modificando o evitando los principales factores de riesgo, tales como:
el consumo de tabaco;
el exceso de peso o la obesidad;
las dietas malsanas con un consumo insuficiente de frutas y hortalizas;
la inactividad física;
el consumo de bebidas alcohólicas;
las infecciones por PVH y VHB;
la contaminación del aire de las ciudades;
el humo generado en la vivienda por la quema de combustibles sólidos.
El consumo de tabaco es el factor de riesgo más importante, y es la causa del 22% de las muertes mundiales por cáncer en general, y del 71% de las muertes mundiales por cáncer de pulmón. En muchos países de ingresos bajos, hasta un 20% de las muertes por cáncer son debidas a infecciones por VHB o PVH.
Estrategias de prevención
intensificar la evitación de los factores de riesgo recién enumerados;
vacunar contra los PVH y el VHB;
controlar los riesgos ocupacionales;
reducir la exposición a la radiación solar.