El cáncer de ovario es una enfermedad con una alta mortalidad porque es difícil de diagnosticar en estadios precoces. La mayoría de enfermas tiene metástasis en el momento del diagnóstico, lo que disminuye la supervivencia a 5 años. Así que podéis entender el miedo que tenía yo cuando me diagnosticaron la enfermedad en estadio IV con múltiples metástasis hace 5 años.
Un gran número de estudios han demostrado que un mayor índice de masa corporal (IMC) se asocia con un mayor riesgo de cáncer de ovario y una menor supervivencia global. Más del 35 por ciento de las mujeres en los Estados Unidos son obesas, lo que supone más riesgo de cáncer, sobre todo de ovario, mama y endometrio.
El cáncer de ovario suele hacer las metástasis en el peritoneo y cavidad abdominal y estas difíciles de tratar de forma exitosa con quimio y/o cirugía.
Un nuevo estudio realizado por la Universidad de Notre Dame ha evaluado si las mujeres obesas con cáncer de ovario son más propensas a sufrir metástasis que las delgadas. Este nuevo estudio ha demostrado que las células del cáncer de ovario crecen más rápido y de forma más efectiva cuando hay células adiposas alrededor. Primero hicieron la prueba in vitro y vieron que en presencia de abundantes células adiposas los tumores crecían más rápido. Después hicieron la prueba en ratones con cáncer de ovario a las que alimentaron con una dieta rica en grasas que hizo que rápidamente aumentaran de peso y la aparición de metástasis aumentó de manera vertiginosa. En presencia de estas células grasas el tumor aumenta su red de vascularización que le provee de alimento y le facilita la diseminación en forma de metástasis y parece ser que se deprime el sistema inmune por lo que no puede luchar de manera efectiva contra el tumor.
Según los investigadores esto da pie a diseñar intervenciones terapéuticas en las enfermas con cáncer de ovario destinadas a controlar el peso y con ello disminuir el riesgo de metástasis. Por eso, una vez más, eso de "come lo que quieras" no nos vale, ni la coletilla "la alimentación no influye en el tratamiento del cáncer".
Creo que os he contado que en mi caso perdí 25kgs durante el proceso de cáncer. Si durante la quimio hubiese tomado las colas, bocadillos de embutido o bollería industrial que me ofrecían en el hospital quizás no estaría aquí disfrutando de esta maravillosa vida y de mis hijos.
Fuente: Y. Liu, M. N. Metzinger, K. A. Lewellen, S. N. Cripps, K. D. Carey, E. I. Harper, Z. Shi, L. Tarwater, A. Grisoli, E. Lee, A. Slusarz, J. Yang, E. A. Loughran, K. Conley, J. J. Johnson, Y. Klymenko, L. Bruney, Z. Liang, N. J. Dovichi, B. Cheatham, W. M. Leevy, M. S. Stack. Obesity Contributes to Ovarian Cancer Metastatic Success through Increased Lipogenesis, Enhanced Vascularity, and Decreased Infiltration of M1 Macrophages. Cancer Research, 2015; 75 (23): 5046 DOI: 10.1158/0008-5472.CAN-15-0706