EL
CAMINO DE LA MEDITACION “VIPASSANA”
ATENCION PLENA, ECUANIMIDAD, SABIDURIA
EL ARTE DE VIVIR
- ¿Cuál es el propósito de la vida?
- ¿Cuál es el primer paso?
- ¿Por qué no vivimos en un estado de paz?
- ¿Cuál es el punto de partida?
- La técnica de la meditación Vipassana ¿Puede ayudar a curar el cuerpo?
El propósito de la vida es salir de la
desdicha. Los seres humanos poseemos la maravillosa capacidad de profundizar en
nuestro interior, de observar la realidad y salir del sufrimiento; no utilizar
esta capacidad es desperdiciar la vida.
El primer paso para emerger del
sufrimiento es aceptar su realidad y no como un concepto filosófico o como acto
de fe, sino como un hecho de la existencia que afecta a la vida de cada uno de
nosotros. Con la aceptación y la comprensión de lo que es el sufrimiento y la
razón de que suframos dejaremos de ser conducidos y empezaremos a conducir, en
la constatación directa de nuestra propia naturaleza nos situaremos en el
camino que conduce a la extinción del sufrimiento; sufrimos innecesariamente
porque no nos conocemos.
No vivimos en un estado de paz,
sencillamente porque nos falta sabiduría y una vida sin sabiduría es una vida
ilusoria, lo que significa permanecer y sostener un estado de agitación, de desdicha,
de insatisfacción y de confusión. Nuestra primera responsabilidad es vivir una
vida sana y armoniosa, buena para nosotros y buena para los demás. Para
conseguirlo, tenemos que aprender a usar nuestra facultad de autoobservacion,
de observación de la verdad.
El punto de partida es constatar que las
fuentes del sufrimiento se hallan en nuestro interior, y solo resolveremos el
problema del sufrimiento cuando comprendamos por nosotros mismos que esto es
verdad. Nunca podremos resolver nuestros problemas ni los problemas del mundo a
menos que empecemos por conocer nuestra propia naturaleza.
Alguien decidió investigar el problema
del sufrimiento humano, tras años de búsqueda, descubrió un camino para lograr
la percepción de su propia naturaleza y experimentar el estado auténtico libre
de sufrimiento. Ese camino que él nos dejó para que ahora lo andemos nosotros
versa sobre el sufrimiento y la erradicación del sufrimiento; camino que
penetra en la naturaleza de la realidad de la verdad. La única forma de resolver
nuestros problemas es viendo nuestra situación tal y como es realmente, debemos
aprender a reconocer la realidad aparente y superficial, y también a ir mas
allá de las apariencias para poder percibir verdades mas sutiles, hasta llegar
a la verdad ultima para poder experimentar finalmente la verdad de la extinción
del sufrimiento. El camino que Buda enseño para que cualquier ser humano
pudiese seguir lo llamo el Noble Sendero Óctuple, Significa la practica de ocho
partes interrelacionadas, es un camino de introspección, de autoobservacion y
lo podremos realizar a través de la
comprensión y la meditación Vipassana.
Sí, la técnica de la meditación Vipassana
puede curar o aliviar enfermedades, pero si desde un principio la meta es exclusivamente
la curación de enfermedades físicas en vez de purificar la mente, no se
conseguirá ni lo uno ni lo otro, ahora bien, si la intención no es otra que la
de purificar la mente, muchas enfermedades desaparecerán automáticamente como
resultado de la meditación.
Son muchas las enfermedades
psicosomáticas que desaparecen espontáneamente al disolver las tensiones de la
mente, causadas por las emociones aflictivas o perturbaciones mentales
abarcando el “deseo – apego, el odio – aversión, la ofuscación, la avaricia, la
envidia, el orgullo, la duda perturbadora y las creencia o visiones erróneas.
Si la mente se altera, se desarrollaran enfermedades físicas que desaparecerán
automáticamente cuando la mente esté limpia de toda negatividad y confusión y esté en calma.
“Lo
que somos es el resultado de lo que fuimos, lo que seremos mañana será el
resultado de lo que somos ahora”.
Budha
