Odile,
Después de mucho tiempo me he decidido a escribirte...
Me llamo Mireia y hace tres años me diagnosticaron un cáncer de mama cuándo estaba embarazada de mi tercer hijo.
En aquel primer momento sentí una gran desesperación. La vida de mi hijo y la mía estaban en peligro... Y entre esa desesperación, una amiga me habló de ti y de tu experiencia. Así que me decidí a leer tu libro y para mi fue como abrir una gran puerta a la esperanza y empecé a cambiar la alimentación, a practicar yoga y rebirthing de forma regular... y a enfrentarme a todo lo que venia con mucho amor. Y por todo ello, quiero darte las gracias!
Me he animado a escribirte porque me di cuenta que los testimonios que aparecen sobre mujeres que estaban embarazadas durante la enfermedad, de algún modo habían tenido que escoger entre su vida o la de sus hijos, y en mi caso no fue así!
En Catalunya, en el Hospital la Vall d'Hebron, existe un equipo especializado en mujeres con embarazo y cáncer de mama. En mi caso, me diagnosticaron en otro hospital y rápidamente me derivaron a esta unidad especializada.
Recuerdo que ante el diagnóstico, no podía dejar de pesar qué iba a hacer si tenia que escoger entre la vida de mi hijo y la mía, pero eso no fue así. Desde el inicio me informaron que existía la posibilidad de empezar a tratarme incluso estando embarazada!!!
Hay un equipo multidisciplinar que hace un seguimiento muy intenso de la evolución del bebé y de la madre. Así que empecé la quimioterapia estando embarazada y cuándo vimos que Gil ya estaba preparado para nacer, me provocaron el parto para que él no tuviera que recibir otra sesión de quimio Después vino la operación, radioterapia... Y hoy estamos aquí mi hijo y yo bien sanos y felices. El trato de todo el personal del hospital, tengo que decir que ha sido siempre inmejorable. Nos cuidaron con mucho respeto, atención y profesionalidad.
Después de mucho tiempo me he decidido a escribirte...
Me llamo Mireia y hace tres años me diagnosticaron un cáncer de mama cuándo estaba embarazada de mi tercer hijo.
En aquel primer momento sentí una gran desesperación. La vida de mi hijo y la mía estaban en peligro... Y entre esa desesperación, una amiga me habló de ti y de tu experiencia. Así que me decidí a leer tu libro y para mi fue como abrir una gran puerta a la esperanza y empecé a cambiar la alimentación, a practicar yoga y rebirthing de forma regular... y a enfrentarme a todo lo que venia con mucho amor. Y por todo ello, quiero darte las gracias!
Me he animado a escribirte porque me di cuenta que los testimonios que aparecen sobre mujeres que estaban embarazadas durante la enfermedad, de algún modo habían tenido que escoger entre su vida o la de sus hijos, y en mi caso no fue así!
En Catalunya, en el Hospital la Vall d'Hebron, existe un equipo especializado en mujeres con embarazo y cáncer de mama. En mi caso, me diagnosticaron en otro hospital y rápidamente me derivaron a esta unidad especializada.
Recuerdo que ante el diagnóstico, no podía dejar de pesar qué iba a hacer si tenia que escoger entre la vida de mi hijo y la mía, pero eso no fue así. Desde el inicio me informaron que existía la posibilidad de empezar a tratarme incluso estando embarazada!!!
Hay un equipo multidisciplinar que hace un seguimiento muy intenso de la evolución del bebé y de la madre. Así que empecé la quimioterapia estando embarazada y cuándo vimos que Gil ya estaba preparado para nacer, me provocaron el parto para que él no tuviera que recibir otra sesión de quimio Después vino la operación, radioterapia... Y hoy estamos aquí mi hijo y yo bien sanos y felices. El trato de todo el personal del hospital, tengo que decir que ha sido siempre inmejorable. Nos cuidaron con mucho respeto, atención y profesionalidad.
Creo que es importante que se conozca que existe este equipo de profesionales, para que cualquier mujer con cáncer de mama y embarazo, pueda ser tratada sin tener que escoger...
Deseo que mi experiencia pueda dar esperanza a cualquier otra mujer embarazada que tenga que enfrentarse a un cáncer, igual que tu experiencia me ayudó a mi.
Un abrazo muy sentido
Mireia